Hace unos días se difundió por varios medios (El Litoral entre ellos) que Santa Fe sería visitada por representantes de una organización privada llamada Software Legal. Este organismo sin fines de lucro y patrocinado en su mayoría por grandes empresas de software extranjeras, realizará inspecciones y certificará a pequeñas y grandes empresas por las licencias de software propiedad de esas empresas patrocinadoras. Obviamente que al hallar infractores buscarán que los mismos regularicen su situación, generalmente mediante desembolsos de dinero.
En el mercado del software existen una gran cantidad de licencias, tantas que lamentablemente muchas veces provocan confusión. Pero podemos identificar al menos dos grandes ramas: las licencias privativas y las licencias libres. Software Legal, por las empresas que la patrocinan, se enfoca en el primer tipo de licencias, las privativas.
Son las licencias privativas las que siempre representan un gran costo en la ecuación hardware+software. Piense que cada PC en su negocio debe tener una licencia por cada software que la hace funcionar. Todo tiene una licencia: el sistema operativo, el procesador de textos, la planilla de cálculos, el editor gráfico, los programas de gestión contable, los servidores web, las aplicaciones para comprimir y descomprimir la información, los clientes de correo electrónico, el servidor de correo electrónico, los juegos de la computadora…. y la lista sigue. Considerando lo anterior, es seguro que deba pagar mucho más por el software que por el hardware y por la administración de esas licencias (deberá llevar algún registro de las mismas)
Las licencias privativas son muy restrictivas. Debe tener una por cada copia que posea del software (a veces es una licencia por cada usuario del sistema, depende de la empresa vendedora), no puede modificar el software a su gusto (impensable poder obtener los medios para hacerlo), debe confiar en la empresa que se lo vendió y queda atado al soporte y las garantías que la misma le brinde. Imagine que compra un automóvil y que el fabricante le prohíbe a usted abrir el capot de su auto, le prohíbe prestarlo a algún familiar o amigo, o cambiarle algún neumático… una prohibición de por vida.
Modelo de negocios y seguridad
Pero por otro lado tenemos las licencias libres. El Software Libre se basa en licencias libres y se consigue fácilmente en internet y hay empresas que trabajan con Software Libre, usándolo o desarrollándolo. Quizás deba pagar por sólo una licencia en algunos casos (más que nada por el soporte), pero el Software Libre que usted compre será realmente suyo: podrá instalarlo en todas y cada una de las PC de su negocio y en las de sus amigos, si así lo desea, ya que puede copiarlo y distribuirlo, la licencia no lo prohíbe. Puede estudiar cómo fue hecho el software y no se ve atado a contratar a quien se lo vendió para obtener soporte, usted puede buscar a quien desee para obtener el mismo. Como el Software Libre puede modificarse a voluntad, puede hacerlo y distribuir esas copias modificadas.
El modelo del Software Libre está orientado al servicio, a proveer soporte y capacitación. Libre no es lo mismo que gratis, siempre algo se paga. El software privativo busca no sólo que usted pague por todo lo anterior, sino también por el producto en sí y le impone restricciones a su uso. Precisamente, la libertad del Software Libre está en la casi total carencia de esas restricciones (tiene otras, pero no afectan a su bolsillo).
Si es por cuestión de costos, el Software Libre resulta más económico. ¿Pero es más seguro? No, no es más seguro, pero tampoco lo es el software privativo. Si se fija bien en las licencias, privadas como libres, todas ellas tienen algo en común: nadie se hace responsable por la pérdidas de datos o fallas en el software, nadie da garantías. Nadie puede. Ni la mejor certificación del mundo.
Como tampoco puede mirar cómo fue hecho el software privativo, nadie le da garantías de que no haya “puertas traseras”. Este es uno de los motivos porque varios gobiernos en el mundo, la mayoría europeos, hayan migrado a Software Libre (se pasan de Windows a Linux). Y como usted sí puede disponer del código fuente del Software Libre, si existen puertas traseras aumentan las oportunidades de llegar a descubrirse. ¿Qué es una puerta trasera? Rápidamente: se trata de una forma de acceso ilegal al software. La misma puede ser utilizada por el programador para mantenimiento, pero también puede ser usada por los ladrones de información, como los cracker.
El apoyo comunitario
¿Hay más documentación del software privativo o del Software Libre? Es algo difícil de contestar. Si se busca en internet encontrará miles de documentos tanto de uno como del otro. Pero también existen comunidades que pueden ayudarlo y son las comunidades orientadas hacia el Software Libre las más numerosas. Prácticamente hay un grupo de usuario de Software Libre en cada ciudad de la Argentina. Santa Fe tiene al LUGLi, Paraná al LUG Paraná, Rosario al LUGRo, Córdoba al Grulic, Capital Federal al CaFeLug y así podríamos seguir enumerando. Todos estos grupos pueden asesorarlo suscribiéndose a sus listas de correos o participando en sus reuniones. Además, anualmente se organizan diferentes eventos de difusión de Software Libre donde cualquiera puede asistir y pedir asesoría gratuita.
El sábado 26 de Abril se desarrollará uno de estos eventos, el cual tiene la particularidad de ser latinoamericano. Se llevará a cabo en decenas de ciudades del continente en forma simultánea. Se trata de la FLISOL, Festival Latinoamericano de Instalación de Software Libre. Este año se organiza en la UNL, en la Facultad de Ingeniería de Ciencias Hídricas (Fich), en El Pozo. Allí podrá concurrir y asesorarse gratuitamente sobre el Software Libre (mayor información en www.lugli.org.ar)
Y dado que el Software Libre tiene licencias libres, y estas son legales, podemos fácilmente concluir que el Software Libre es también software legal. Y usted no necesitará inspecciones foráneas si su software es Software Libre, y ahorrará costos de inspecciones, costos de software y costos de multas. No en vano grandes empresas como IBM, Sun, Red Hat, Nokia y otras, apuestan por el Software Libre.
Su negocio es tanto o más importante que esas empresas. Mejor invierta su dinero en desarrollarlo antes que pagar por licencias privativas, en su mayoría extranjeras. Y sepa además que apoyar al Software Libre es la mejor forma de apoyar a la Industria Nacional. Y mejor aún, es la mejor forma de apoyar a los desarrolladores locales. Aquí en Santa Fe, y en la región, hay gente que puede ayudarlo.
hola hey el articulo esta muy bueno pero necesito un poco mas de informacion acerca de las licencias privativas y la factibilidad legal para crear un sitio web si me puedes ayudar estaria muy agradecido
Cuando creas un sitio web, cada elemento tiene su propia licencia: botón, imágenes, texto… Si el texto es original tuyo, puedes ponerle la licencia que creas más apropiada. Si copias el texto de otro lado, hay que ver con qué licencia ha sido publicado. Hay elementos (botones, imágenes, etc) que tienen licencias libres, otros serán privativos. Con las imágenes, sobre todo, hay que tener cuidado la licencia que tengan. Si pones una foto de una modelo perteneciente a una revista o usas el logo de una popular gaseosa, quizás los propietarios de esas imágenes quieran intimarte a retirar la imagen, o inicie acciones legales, si lo desean.
Así como hay varios tipos de licencias libres, también hay varios tipos de licencia privativas. En todos los casos, lo que hay que hacer es leerla detalladamente.